Dándole una conclusión ejemplar al legado de Francisco de Miranda y su lucha por unificar América, quitándole poder a esos que han gobernado bajo el manto de la corrupción.
Anteriormente se dijo que el señor Miranda iba a tener un inconveniente con un supuesto tratado de extradición a España. Sin embargo, eso quedó en "amanecerá y veremos" cuando concluyó la segunda parte de esta historia, y hoy sabremos de ante mano en qué concluyó todo este embrollo; y no daremos más vueltas al asunto porque necesitamos conocer la verdad de lo que pasó en ese tiempo. Si usted es alguien que desea la verdad absoluta, quédese porque esto apenas comienza y no se deje engañar por personas carentes de masa cerebral que solo buscan tachar esto con algo de histrionismo. Bienvenidos.
...Miranda conoce en Moscú todo lo que es digno de conocer, eso incluye el Kremlin y las diferentes catedrales, la basílica de San Basilio, la universidad en la que, bajo Pedro el Grande, se universalizó el conocimiento de las ciencias. Él conoció al pueblo moscovita, sus reuniones de placer, sus bailes y danzas, sus comidas típicas y el licor que beben sedientos. Y, como es natural, a las mujeres jóvenes y hermosas. Casi todas se entregan por dinero, incluso casi niñas (aberrante hoy en día), como ocurre por cierto en gran parte de las naciones donde sus pasos lo han llevado en este extenso viaje.
Por supuesto Miranda paga con cierta economía por estos amores fugaces que se escapan en las gélidas sombras de la noche. Pasa allí cerca de un mes. Catalina ciertamente lo llegó a amar en Crimea, amor que renovó intensamente en Petersburgo. Y se diría que, en el recuerdo de tales horas, lo amó a la distancia un largo tiempo. Hasta que Miranda se hizo general de los ejércitos de la Revolución Francesa. En prueba de tal amor, Catalina misma le entregó una copia original del despacho circular que envió a los embajadores con órdenes terminales de protección al suramericano. Dice así:
Queriendo Su Majestad Imperial dar al señor de Miranda una prueba señalada de su estimación y del interés particular que le inspira hay que subrayarlo, ordena a V.E. (Vuestra Eminencia) que tan pronto como reciba la presente carta, acoja a este Oficial conforme al aprecio que ella misma hace de su persona, rodeándole de todos los cuidados y atenciones posibles, acordándole su asistencia y protección siempre que de ellas tuviese necesidad y las solicitase, y en fin, de ofrecerle, si llega el caso, como asilo, su misma embajada.
La Emperatriz, al recomendaros a este coronel de una manera tan distinguida, ha querido demostrar cuánto aprecia el mérito donde allí se encuentra y que, para aspirar de preferencia a sus bondades y alta protección, no puede haber mejores títulos que los que posee el señor Conde de Miranda. La voluntad de nuestra soberana es que el contenido de esta carta quede en el secreto más impenetrable. Luego, entre las largas jornadas de un camino interminable de 730 bersas, llega a Petersburgo el 14 de junio, en el comienzo de un verano suave y prometedor.
Allí estará tres meses y se aloja cómodamente en casa del general Levachow, al que había conocido en Kiev. Este le había entregado una carta de presentación para su hermano, el coronel del mismo apellido, en que le ordenaba que lo hospedara con las mayores consideraciones en su casa o apartamento. La Zarina se encuentra en Chersone, pero habrá de llegar unos días después, como efectivamente ocurre. Él va ansioso hasta la iglesia de Tzarcoie Selo, palacio de verano en el que viven los zares, y espera en el atrio la salida de los feligreses, uno de los cuales es la zarina, que como siempre está acompañada de las damas de la corte y del séquito de Edacanes y Gard of Corps.
Al verlo ella se alegra, y a pesar del rígido protocolo y de la comitiva, lo saluda con cariño y le cuenta al oído el peligro en que se encuentra con los españoles. Luego lo hace entrar al palacio y esa visita dura veinte días. Se aloja en las alcobas destinadas a la corte, como ocurre en todos los palacios reales. Los cortesanos viven en palacio y acompañan siempre al soberano. Para algo se es alguien autócrata al que nadie puede censurar ni contradecir, y se cuenta que entre ellos los arrebatos románticos de Miranda, en alguna oportunidad le dice a la soberana, soñando con su patria, que la bandera que llevará a América será un recuerdo inolvidable de ella, porque tendrá una faja amarilla como el rubio cabello de la emperatriz, otra faja azul como la azul mirada de Catalina y otra roja como sus encendidos labios.
Y así lo cumplió.
Por otra parte, Francisco de Miranda fue masón y fundó en esos tiempos la Sociedad Lautaro, conocido también como Logia Lautaro o Caballeros Racionales; teniendo una vinculación con la sociedad matiz de Londres, denominada la Gran Reunión Americana con el objetivo inmediato de revolucionar Caracas, para lo que buscó sucesivamente el apoyo de países como Francia, Estados Unidos e Inglaterra. La independencia de América y la implementación del sistema republicano eran el objetivo de las logias Lautaro.
*El primer grado de iniciación era trabajar por la independencia americana, y el segundo la profesión de fe democrática, jurando “no reconocer el gobierno legítimo de las Américas sino aquel que fuese elegido por la sociedad libre y espontánea voluntad de los pueblos, y de trabajar por la fundación del sistema republicano”. De hecho, estas sociedades secretas aplicadas a la política eran cosa muy distinta de la masonería, e incluso de la carbonería, de las que solo habían tomado una superficial apariencia de signos, fórmulas, grados y juramentos secretos.
La institución de Miranda fue obra pura y exclusivamente suya; fue él quien la ideó, fue él quien la fundó, fue él quien la dirigió, erigiéndose por sí y ante sí en Gran Maestre. Fue una sociedad secreta sí, pero una sociedad secreta de carácter político, para un propósito perfectamente definido que nada tenía que ver con el que pretendía la masonería como tal. Basta comparar las constituciones, reglamentos e incluso el juramento de estas “logias” Lautaro o Caballeros Racionales, para constatar que no eran otra cosa que sociedades secretas políticas que buscaban la emancipación americana y la implantación del régimen republicano en los países de ultramar.
El error radica en la simplificación que, a veces, se hace al confundir sociedad secreta con sociedad patriótica o política, o la equipación de ambas con la masónica. La confusión proviene fundamentalmente de elevar a categoría de esencial lo que es puro accidente y, sobre todo, de la ignorancia de quienes olvidan finalidades y proposiciones programáticas expresadas en constituciones y reglamentos, para acogerse sólo a formalidades externas o terminológicas. Dicho lo otra forma, cuando se olvida lo estructural ideológico, político y social, y se carga el acento en lo meramente lingüístico o semántico o incluso en lo organizativo y esotérico.
El problema se agudiza, ya que, en aquel entonces, muchas de estas sociedades, desde las literarias y económicas hasta las políticas y patrióticas, sin olvidar por supuesto las masónicas. Tenían puntos ideológicos en común que, sin perder su propia idiosincrasia, ofrecían gamas variadas que facilitaban la doble o triple militancia, pudiendo ser uno al mismo tiempo patriota, masón y carbonario, por poner un ejemplo. El caso del Libertador Simón Bolívar con sus contactos lautarinos en Cádiz (España) o Londres y su pertenencia masónica en París puede servir de ejemplo.
Sin embargo, la dificultad aumenta cuando posibles actuaciones o militancias transitorias o muy localizadas en el tiempo y en el espacio, se generalizan y extienden a toda una vida, como si no existiera la decepción, el cansancio o simplemente la manipulación y desviaciones tanto en las instituciones como en las personas. El propio Bolívar, uno de los próceres del que se consta documentalmente fue masón y, sin embargo, prohibió en 1828 todo tipo de sociedades secretas en la Gran Colombia, desapareciendo la masonería de la zona durante más de veinte años.
*Fragmento tomado del libro La Masonería de Ferrer.
Y esto colombianos, es la historia de uno de los próceres más grandes que parió Latinoamérica. Y el trato que tuvo con la zarina Catalina II en las anteriores partes nos hace pensar que ese evento lo estamos presenciando hoy en día con todo lo que está ocurriendo tanto en Colombia como en Venezuela y en Ecuador, ya que los tres comparten los mismos colores que Miranda mencionó anteriormente antes de volver con el título de "El Americano más Universal". Obviamente eso no será lo único que hizo en vida, y dejaré el siguiente vídeo para que ustedes lo vean.
Y siendo él venezolano de nacimiento, impactó en el mundo con su legado, su historia, y su lucha por obtener un continente justo y libre de corrupción, que tomó como objetivo acabar con los reyes de todo el mundo y las monarquías corruptas que siguen hasta el día de hoy gobernando. Pero algo claro tenemos nosotros: el ser humano no puede vivir sin leer su propia historia y sin conocer cómo es que todo lo que tenemos ahora se logró gracias a ellos y como unos pocos quieren eliminar el pasado que no les gusta que la juventud lea y comprenda.
No obstante, las mentiras que inculcaron los medios tradicionales hoy están desapareciendo gracias a que se han revelado noticias y eventos turbios que los más poderosos quisieron ocultar y al final no pudieron por su ineficacia, ineptitud e incompetencia, todas tres rodeadas de corrupción y narcotráfico. En esta pandemia que vivimos hemos leído muchas cosas y hemos activado ciertas cosas que la religión católica ve con malos ojos como “oscuro y del diablo”, pero ellos son tan hipócritas que allá en el Vaticano tienen guardado más de 1500 registros históricos sobre toda la historia universal y la tergiversan para que el mundo no conozca la verdad. Y esto al final es cierto.
Los mismos tibios acorralados y temerosos de una gran verdad que por mí se pueden terminar suicidando para bien de la sociedad, pero lastimosamente serán sometidos a mi proyecto en donde el conocimiento y la historia serán primordial para que dejen de ser esos pendejos que les gusta vivir de contratos y aspirantes a narcos con tenis y pensamientos de estilo light. Sí, es con esa secta del Partido Verde que hoy ya no tiene poder para gobernar un cargo importante como lo es la alcaldía de Bogotá que no tienen pena ajena y usan los mismos discursos y las mismas palabras para estigmatizar a sus opositores.
Y de esos personajes que viven de contratos, a ellos les llegará su tajo de críticas de mi parte para que no lo olviden...
Fin.
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