Carentes de humildad, prefieren ver al pobre como a una bacteria que no se puede erradicar. Porque es lo que ellos quieren para preservar su status quo, despreciando al más vulnerable.
Hemos hablado de misántropos, avaros, conformistas y derrotistas, pero el mayor mal del colombiano se remonta en los bajos placeres del egoísmo hacia un pasadizo oscuro lleno de oro putrefacto llamado aporofobia. Ustedes, o algunos deben saber que es ese término, es tan desconocido que su léxico no les da para extender su mente más allá mientras escuchan música de ambiente y oscura como lo he hecho cuando estoy solo en mi casa.
Esta palabra proviene del griego “áporos” que significa pobre, y “fobos” que significa miedo. Y son vistos en la sociedad colombiana varios ejemplos que han pasado de este agache en los últimos años y como sociedad hemos sido víctimas de nuestra propia ignorancia. Defendiendo a una persona rica y poderosa, es el caso ejemplo de la agonizante organización del uribismo, quienes hemos visto que sus mentiras van cayendo poco a poco. Sin embargo, tantos viejos como jóvenes se han puesto la capa y toman la espada para defender a estos personajes que desprecian a la persona pobre, la misma que carece de recursos gracias a un gobierno corrupto como lo es Colombia.
Todo esto se ha remontado desde principios de los años 50, cuando los ricos de esa época empezaron a extenderse hacia el norte de lo que hoy conocemos como Usaquén, Chapinero, Santa Fe y Suba. Algo que destacar de estos personajes, es que van a colegios privados, autos de lujo, apartamentos, y son extremadamente arrogantes, que ven a la sirvienta como su mayor motivo hacia el desprecio y la insatisfacción de enviar a la gente de estratos bajos a que vayan a prestar servicio militar y que se maten en una guerra donde ellos salen beneficiados, ya que tienen sus contratos listos, firmados y con el billete en la mano.
Según la filosofa española Adela Cortina, catedrática de Ética y Filosofía Política de la Universidad de Valencia, este término fue acuñado en la década de los años 90, como diferenciación de la actitud xenofóbica, y solo se refiere al rechazo al extranjero y al racismo. Un resumen poco animoso para unas personas que son hostiles, que sufren de aversión, con respecto a las zonas o barrios carentes y ven a las personas pobres, como un estorbo. Palabras más, palabras menos, para unas personas que no quieren a la gente de escasos recursos en sus vecindarios.
Ejemplo: Una mujer que rechaza ver personas pobres sustentando su existencia vendiendo tintos. Ella los ve de mala gana, empieza a presumir su “cultura” y los empieza a tratar mal, por el simple hecho de ser pobres.
Aquí en Colombia, más que todo en los estratos 0,1, y 2 son los que más se llevan el resentimiento de los personajes a mencionar. Personajes como la secta y organización del Centro Democrático, empezando por su jefe político Álvaro Uribe Vélez, seguido está Marta Lucía Ramírez, Paloma Valencia, Ernesto Macías, Iván Duque, Alfredo Rangel, Josías Fiesco, Laura Estefanía Medina, Miguel Uribe Turbay, Enrique Peñalosa Londoño, entre otros personajes que cada cuatro años refuerzan su marginalización hacia el ser humano pobre cuando van a hacer campaña política, y ver como compran la dignidad de esa sociedad.
Cabe dejar claro que no es un trastorno mental, pero sí un problema que los colombianos más poderosos y dueños de los medios de comunicación como los señores Luis Carlos Sarmiento Ángulo, Carlos Ardila Lulle, Familia Santo Domingo y Jaime Gilinski Bacal, los más ricos son los más aporófobos y son los que más se adoptan a un sesgo ideológico, vinculados por la extrema derecha política.se meten en la cabeza la idea de vivir en una meritocracia impune a la pobreza, que puede cuestionar la actitud personal y su fuerza de voluntad.
Pero, para que tener voluntad si el dinero es lo que puede comprar todo, según ellos. Y empiezan a obtener una mentalidad de individualismo, un potenciador de variantes ideológicas que llevan a concluir que las personas pobres no quieren ser parte de la adaptación de un sistema que es fuertemente jerarquizado. Basarse en la incomodidad que le genera fastidio por la gente pobre que está a su alrededor, y no ayudan a hacer nada para mejorar esa situación.
Cuando hablamos de aporófobos, tenemos un claro ejemplo de personas como Isabella Wills, que tuvo el descaro de referirse a los profesores con la siguiente frase: "Ponerse a marchar debajo de la lluvia, en vez de salir a trabajar huevón, para dejar de andar exigiendo derechos y privilegios como si todo lo que el Estado tuviera que dar es gratis".
Ella con el rencor que le tiene a los pobres de la ciudad y a la Colombia Humana, vemos que estos ricos sufren de una tensión psicológica, y de un malestar que llega cuando dos ideas diferentes y contradictoras chocan entre sí. Y para que esperar que uno de esos triunfe, si no van a estar basados en la autoestima de que un hecho así, choque con el fin de no ayudar a los más vulnerables.
Pero uno se pregunta si esas riquezas que ellos poseen les pueden durar para siempre. ¿Cierto? Y es su falta de contactos con nosotros, que por ser pobres no podemos seguir sociables ni humildes, porque a ellos les hace falta eso. Facilitando su más grande odio hacia todo el que piense diferente, su odio y rechazo hacia aquellos sujetos que son vulnerables, su odio hacia esas personas que no pueden aportar nada a la sociedad. Su falta de ética y moral creen que lo pueden compensar con sus pertenencias, creen que con un jet privado, un Ferrari, una mansión, van a tener todos los valores que nunca tuvieron en un colegio decente, humilde y público.
Los aporófobos de Colombia se descargan, se desquitan con los departamentos donde no tienen nada y no hay como ellos puedan sobrevivir. Recordemos cuando Alberto Carrasquilla Barrera dijo que el departamento del Chocó es una carga para el país, unos no lo recuerdan porque su falta de estudio. Ya que viven conformes, con pensamientos pobres y sufren de derrotismo simultáneo, una infortuna precariedad para esos trabajadores que aumentaron y cuentan con un empleo no es una garantía para tener buenas condiciones para la vida, no hay condiciones para suprimir el miedo a ser pobre y hace que veamos sin protección hacia la inseguridad.
Todos estos datos se reflejan gracias esas investigaciones de personas que han dedicado su trabajo por exponer la verdad, y hago aquí mi propio resumen sin ocultar nada, yo siempre he crecido en lugares donde el factor principal de mi vida es la pobreza, pero no tengo miedo de golpear a un niño rico y de ponerlo en su lugar. Bueno, eso estuvo a punto de pasar en junio de 2018 cuando un niño entre los 18 y 25 años de la secta uribista me empujó solo por tener un afiche de Petro Presidente, le dije que si volvía a tocarme, le troncharía la mano.
Obviamente salió corriendo después de su confrontación conmigo, solo porque apoyo a una persona que quiere y protege al más pobre.
La empatía del rico que es arruinada por personas pobres que se sientan en su territorio, y no crean que lo que digo no es verdad, los he visto cada vez que paso por Unicentro, por la Avenida 19, por Cédritos, no lo nieguen. Ustedes los ricos, nos temen porque tenemos más valores y más cerebro del que ustedes jamás en la vida van a tener, y pueden tener todo el dinero del Estado con sus contratos, pero ni la belleza ni el dinero les va a durar para siempre.
Nos rechazan, bien; nos odian, bien; no obstante, son ustedes quienes llevan la aporofobia en su sangre, ya que piensan solo en ustedes y no en el pobre. ¿Verdad Miguel Uribe Turbay? Usted que ha vivido del Estado gracias a su tía abuela la señora Nydia Quintero Turbay de Balcázar, es un cobarde y aparte de tener problemas psicológicos y trastorno mentales, su odio hacia los pobres cuando fue Secretario de Gobierno 2016-2018 y comprando votos regalando detergentes y jabones con su cara y la lista de cabeza al Concejo del Partido Liberal, eso no lo olvidaré.
Y créame, me alegró de que perdiera, porque usted es el doble de egocéntrico, misógino y sobre todo, descender de una familia que practicó el incesto, y muchos de sus defensores niegan estos hechos, porque usted les dijo mentiras en su cara, les dijo que los pobres somos una amenaza para el país, que se puede esperar de un mongólico como usted, del cual se merece el peor de los castigos por decir que Rosa Elvira Cely y Dilan Cruz fueron culpables de sus propias muertes.
Con solo 34 años y la aporofobia les segó las pocas neuronas que posee, claro, se puede esperar de un nieto bastardo que quedó endeudado tras perder las elecciones a alcalde, que esperar de un personaje que sale huyendo de los argumentos de los que pensamos diferente a usted. Podrá no tener un apoyo materno ahora, pero su padre Miguel Uribe Londoño le enseño a ser una personas de las más despreciables de los estratos más altos de Bogotá, y sí, el hecho de que usted se refugie como una tortuga de sus contradictores pobres, no significa que puede ocultarse para siempre de nosotros.
Para esos aporófobos que siempre han tenido ese odio a los que menos tenemos, les decimos que sus creencias, su indiferencia, sufrimiento ajeno, insultos y agresiones, no los harán buenas personas. Ustedes quienes tienen todo el dinero del mundo, alguien se los va a quitar y padecerán una gran crisis económica que los va a afectar en todos los sentidos, y no pueden escapar de esa rabia de saber lo que ser pobre, humilde y necesitado.
Sé que nos veremos las caras cuando venga la ruina total en Colombia, ¿Y creen que los vamos a dejar salir del país? No señores, ustedes y su aporofobia se quedarán aquí, pediremos que congele y expropien sus bienes, su dinero, sus pertenencias, todo lo que nos han restregado en la cara, serán eliminados de su vida. Y nos tratan como delincuentes, vándalos, mamertos, y que queremos todo regalado. ¿No es así? Esos son los términos que usan esas sectas de ricos y logias de ignorancia pura, con el fin de decir que estamos en la calle porque no queremos trabajar.
Deberían de mirarse a un espejo…
*Agradecimientos a @GUDOWH2 por mencionar el término del cual se hizo esta columna, basada en la investigación de la filósofa española.
