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LA BURBUJA DE UN IDIOTA QUE NO ES COLOMBIANO

Actualizado: 23 sept 2020

Columna publicada el 02 de Octubre de 2019


1954, año en el que la incompetencia se hizo un ser humano nacido en los Estados Unidos. Enrique Peñalosa Londoño, hijo de Enrique Peñalosa Camargo fue director del que era la institución del estado conocida como INCORA creada para reformar el agro en Colombia, programa hecho por el fallecido presidente y abuelo de Germán “Coscorrón” Vargas Lleras, Carlos Lleras Restrepo el cual, luego de varios sucesos Peñalosa Camargo fue nombrado Ministro de Agricultura, catalogándose como el peor de todos los tiempos.


Este señor es recordado por ser una persona que por tener tatuada en el alma la corrupción casi arruina al campo colombiano, beneficiando a un puñado de empresarios millonarios y anclando a la miseria a millares de campesinos pobres colombianos. Mientras tanto, su hijo Enrique, siempre que iba al colegio no la pasaba muy bien cuando se trata de socializar con sus compañeros, ya que todos los días sufría de bullying. Enrique comparte la misma visión de su padre afirmando que una ciudad progresista según él, era de que la ciudad debería estar medido en toneladas de concreto y acero, sin siquiera ver un solo árbol en las calles.

Ahora sabiendo esta información, la familia Peñalosa, en especial su hijo Enrique durante toda su vida desarrolló dos problemas que se catalogan como la fobia más común y la otra que se considera como un sesgo cognitivo, y al parecer esto es hereditario. Yo no psicólogo pero esto que padece el futuro ex-alcalde de Bogotá por segunda vez, lo hace una persona estúpida y llena de rencor. Su odio y miedo hacia los árboles es llamado dendrofobia, consiste en frecuentemente en sentir temor en ser atrapado y quedar restringidos de movimiento por las ramas de un inofensivo e inocente árbol.

La otra enfermedad de la que vamos a hablar es lo que tiene a Bogotá como el mierdero inseguro y el logro más importante, según la mente diminuta de Enrique Peñalosa Londoño. Estamos hablando del síndrome de Dunning-Kruger. Consiste en que los seres humanos se consideran listos e inteligentes, siendo las personas menos dotadas e inútiles de la sociedad. Analizando el patrón cognitivo de estas personas incompetentes e inconscientes de su incompetencia, no solo se confirma en pruebas abstractas de laboratorio sino que es extrapolable a situaciones reales (ética, inteligencia, capacidad para jugar al ajedrez, ortografía, gramática…) etc.

Enrique Peñalosa en sus dos gobiernos ha sobrevivido a dos revocatorias, saboteadas por sus amigos y conocidos que querían que se siguiera robado el dinero de los colombianos. En su primer mandato el índice de pobreza en la ciudad pasó del 35,1% al 50%; argumentando que la cuestionada implementación del famoso proyecto conocido como TransMilenio y del trato que aún mantiene con los estratos más bajos, trajeron costos elevados a la ciudad que actualmente seguimos pagando.

En 1999, la revocatoria de Peñalosa en ese entonces un movimiento del cual nunca se supo el nombre había radicado 672 mil firmas, y de esas mismas salieron 412 mil fueron anuladas. Y aunque en ese tiempo se cumplió el plazo para la entrega de firmas en la Registraduría, el movimiento aspiró a radicar cerca de 100 mil más, pero a pesar de que todas fueran válidas no se alcanzaría a cumplir la meta exigida de 507 mil firmas. Una lástima.

17 años después pasaron y Enrique Peñalosa Londoño volvió a la Alcaldía de Bogotá con más de 900mil votos, pero viniendo acompañado de sus amigos constructores y de su jefe de campaña en ese entonces el senador Carlos Fernando Galán Pachón y cogido de la mano de otros financiadores como lo son RCN Televisión, Almacenes Éxito, Fundación Propublica, Fundación Suramericana y Bancolombia que son los que más se destacan porque esas mismas empresas aportaron a la campaña al senado de 2014 de la señora Claudia Nayibe López Hernández.

Durante todo el 2016, se obsesionó en sus obsesiones arcaicas y egocéntricas, urbanizar reservas, la quema de los cerros orientales ocurrido en el mes de febrero de ese mismo año, la represión que ha mantenido gracias a que usa al ESMAD como su servicio al cliente personal, pero el domingo 24 de enero la gente se manifestó por la inconformidad de los bogotanos cuando se supo que Peñalosa volvió a la Alcaldía, durante ese año se descubrió que el doctorado y la maestría que él dijo tener en su hoja de vida no existen.

Expuesto en un artículo de El Espectador el 7 de abril de 2016. Se supone que estaba impedido para postularse para ser alcalde, el ITDP, empresa encargada de vender buses Volvo es quien ha estado administrando Peñalosa como su presidente, pero él se cree intocable, o eso es lo que él dice, pero ha tenido en estos tres años golpes muy bajos y evasivas cobardes.


Por ejemplo: Aparte de haberse descubierto su mentira, desde febrero se empezó a promover la emblemática colatón, donde miles de ciudadanos protestaron dentro de las casetas de TransMilenio, en Soacha las puertas de la caseta de San Mateo quedaron averiadas y no fueron las únicas en ser dañadas, y todo por pagar un pésimo servicio de tan solo 2200 pesos. Todo lo ocurrido cuando empezaba a sonar los tambores y las voces de la revocatoria de Peñalosa, en ese tiempo se estaba dando la pedagogía de cómo usar los mecanismos de participación ciudadana.

Llegó el 2 de enero de 2017 y el inicio de la recolección de firmas había comenzado, por toda Bogotá empezamos a recoger las firmas necesarias, pero nunca faltaban los ignorantes que le escupían, lo trataban mal, lo denigraban y hasta hubo intentos de que nos lanzaran piedras, y todo por pedir una firma. Pero no nos rendimos, meses antes de iniciar la revocatoria el sabotaje internamente empezó por uno de los emisarios de la organizada y traicionera secta del MOIR, partiendo en dos grupos para su recolección de firmas. Ustedes se preguntarán, ¿Quién fue esa persona que saboteó el grupo original de la revocatoria? Yo no estaba en ese entonces, pero la persona responsable de esto es candidato al concejo por el Polo, pero aquí lo vamos a llamar Alberto Arenas. En ese mismo año se hicieron dos estampidas, el primero inició el 9 de junio iniciando desde el Parque Nacional hasta el Parque de la 93, obviamente estaban los de la fuerza pública que nos empezaron a acompañar desde la calle 63. La otra estampida inició el 6 de diciembre desde Iserra 100 hasta el conjunto de Calatrava, lugar donde vive la señora Cecilia Londoño de Peñalosa, mamá del actual alcalde de Bogotá, yo estuve en la primera pero no en la segunda, lástima no haber ido.

En ese tiempo, el señor Andrés Villamizar Pachón, primo del candidato “independiente” Carlos Fernando Galán, había fundado a su socio José Fernando Flórez la llamada Fundación Azul Bogotá el futuro no se revoca. Fundación encargada de defender con sabotajes y mentiras la imagen de Enrique Peñalosa, sin embargo, Flórez se metió en un enorme problema gracias a una denuncia penal que le interpuso la Registraduría. Noticia que fue publicada el 5 de mayo de 2017 a las 10 de la noche, en donde dicho artículo menciona lo siguiente: La Registraduría Nacional presentó ante la Fiscalía una denuncia contra José Fernando Flórez, promotor de comité de revocatoria contra el alcalde Peñalosa, por el delito de fraude procesal ya que habría argumentado motivos falsos para solicitar el proceso a manera de "experimento". Craso error.


No pondré todo lo que dice, pero dejaré el link para que ustedes mismos vean como este columnista de El Tiempo hizo esa estupidez: https://www.rcnradio.com/colombia/registraduria-denuncio-penalmente-a-promotor-de-falsa-revocatoria-contra-penalosa

Continuando con el tema de la revocatoria, en febrero de 2017 Peñalosa y varios de sus concejales que tiene como adeptos tenían como fin sabotear el cabildo a la ETB, ya que en 2016 junto al señor Jorge Castellanos se pusieron la tarea de marchitar la empresa pública de los bogotanos para ser vendida a las transnacionales. El cabildo fue vendido y totalmente saboteado, hubo hasta empujones y disputas en este evento.

Llegó el 12 de julio de 2017 y a nosotros durante la feria del libro de ese año nos robaron una maleta donde estaban la mayoría de las firmas, mientras que el otro grupo había conseguido más de 700mil firmas pero superaron sus topes de financiación y de ahí se llevó a una investigación, el cual terminó culpabilizando a Gustavo Merchán con una sanción de 26 millones de pesos, noticia que fue publicada el 22 de agosto del año pasado. En otras palabras, sabemos que el Consejo Nacional Electoral es el responsable de haber dilatado la revocatoria de Peñalosa, los culpables de esta atroz decisión de defender a un corrupto son los magistrados que estaban en el período 2014-2018, a excepción del señor Armando Novoa, ya que él mismo contó que sus compañeros magistrados en ese entonces hacían jugadas sucias y hablaban mal de él.

Después de haberse librado de ese peso, Peñalosa ahora estaba embolatado en problemas mucho más personales. Como por ejemplo, el pasado 25 de noviembre de 2017 el columnista de El Espectador Yohir Akerman publicó un artículo en donde se evidencia un apartamento que no ha sido registrado en la curaduría distrital, ya que el dúplex que vendieron Peñalosa y la señora Mónica Camejo un apartamento en el que ellos vivían. Situado en la Carrera 10 # 88-01, ese mismo apartamento fue vendido por el señor Nicolás Camejo, hermano de la mencionada anteriormente, se dice que aún sigue viviendo por la 88 en el barrio Chicó Oriental.

Otro caso en donde estuvo involucrado Peñalosa es en el caso de la señora Mónica Rodríguez. La noticia tuvo lugar el 16 de diciembre de 2017 donde ella manifiesta que el alcalde de Bogotá trató mal a la mamá de la ex-presentadora y locutora. En dos trinos se mostró la evidente pelea entre ellos, el trino de Mónica citó lo siguiente: “Si supieran como Peñalosa trató una vez a mi mamá alzándole la voz y diciéndole ignorante con toda su arrogancia, no se jactarían”. Una usuaria le contestó a ella que se lo hubiera comido vivo de haber sido ella, Mónica contestó a ese trino diciendo: “Pues es que si no hubiera estado ahí lo hubiera hecho ¡Que crees! El tipo es arrogante, patán, déspota, malaclase, falso... Lo ha demostrado en varios contextos... Mal gobernante”.

En un país decente, Peñalosa estaría en la cárcel. Pero con la actual pareja que él tiene en el Ministerio de Educación, quien sabe si eso vaya a suceder. Así que dejaremos el tema de María Victoria Ángulo y sus pechugas de 40mil pesos cuando era Secretaria de Educación, y Peñalosa en esta alcaldía ha hecho 44 viajes que le han costado a la ciudad la suma total de 668.609 pesos si era un viaje nacional o si era un destino internacional se podían entregar hasta 640 dólares por día.

En cuanto a la publicidad, esos 91mil millones de pesos se perdieron en modo de desesperación por ser más popular. Sin embargo, el mayor dolor de cabeza que ha tenido en el último año es cuando el actual concejal de Bogotá y candidato a la alcaldía Hollman Morris el pasado 6 de agosto de 2018 instauró ante la Fiscalía General de la Nación una denuncia penal por los presuntos delitos de fraude procesal, prevaricato y ocultamiento de información, contra el alcalde Enrique Peñalosa, gerente de la Empresa Metro, Andrés Escobar, Secretaria de Hacienda, Beatriz Arbeláez, Clemente del Valle, presidente de la Financiera de Desarrollo Nacional y demás miembros del gobierno distrital y nacional que han estado involucrados en la estructuración del proyecto metro elevado.

Lo inesperado de esto, es que la Contraloría General de la República encontró 45 irregularidades en la contratación del proyecto de la primera línea del metro elevado. Y la respuesta descarada de la administración de Enrique Peñalosa agregó que “la Empresa Metro no comparte los presuntos hallazgos del equipo enviado por la Contraloría Distrital y reafirma que el proceso se ha surtido en el marco de la legalidad".

Esa licitación del metro elevado ya venía siendo cantada desde que Peñalosa volvió a la alcaldía de Bogotá. Y terminando esto, despido esta columna con una de las frases que Hollman Morris dijo el pasado 7 de abril de 2019 en respuesta a lo que dijo Enrique Peñalosa. Esto fue lo que dijo en el Concejo de Bogotá.

“Más rápido se irán a la cárcel aquellos funcionarios que sin ningún sustento técnico tumbaron seis años de estudio, tiraron a la caneca 140.000 millones de pesos de estudios del metro subterráneo y que detuvieron ese proyecto que estaba listo para entrar en licitación, que hoy estaría llegando a la calle 100 y entrando en operación en 2021. Es decir, es más probable y rápido que usted, Enrique Peñalosa, termine en la cárcel”.

Este 27 de octubre, acabaremos con la godarria de Colombia.



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