Una persona que ha sido fiel sirviente de la oligarquía colombiana y que ha dado su propio punto de vista a través de un periodismo corrupto y expuesto por los colombianos de a pie. Un ser que es despreciable con el cargo actual que mantiene para salvar a sus amigos.
Para pasar por la abogacía, la política y actualmente el periodismo, el señor Juan Francisco Lozano Ramírez no es lo único que tiene que destacar a la hora de decir las cosas cuando dirige en la actualidad la emisora de La FM donde antes trabajaba el pelmazo de Luis Carlos Vélez (Véase: POLLO TRISTE Y DESPRESADO), y sea actualmente un desinformador que no da las expectativas para ser un líder en una emisora poco favorable para la opinión pública. Creyó que en el Noticiero NP& con Los Reencauchados le darían algo de relevancia mientras estaba como senador de la república por el Partido de la U, pero ni así consiguió ser respetado. Con esa parodia que le hicieron llamada Juan Gozano, no solo causó muchas risas, sino que antes de los memes de Internet, usted ya se daba a conocer como uno de ellos gracias a ese programa.
No se le notó esa lamida de botas que tuvo el pasado 5 de febrero cuando la señora Victoria Eugenia Dávila fue a esa emisora a darles una entrevista y decirles lo que tiene en mente para el país, pero se le olvida a usted, señor Lozano, que ella es una agente de los gringos y al mismo tiempo tiene la intención de negarlo frente a todos los colombianos mientras disimula de dientes para adentro. O en este caso, de narices para adentro. ¿No es verdad? Lo que escucharon los colombianos fue una simple alabanza hacia una persona que defiende el sionismo israelí y tiene tendencias anglófilas. ¿Usted sabía eso, señor Lozano Ramírez? Usted se hace el de la vista gorda al haber escuchado su discurso barato de que Gustavo Petro tiene en crisis el país, según el punto de vista de ella. Antes de que entrara a su set, posteó esto:
“Nos vemos hoy miércoles a las 7:30 de la mañana en La FM con su director Juan Lozano y toda su mesa de trabajo. Ya en camino para estar en la cabina. Nos vemos La FM y Juan Lozano”.
Entonces, señor Juan Francisco, ¿el trauma del “petrismo” no lo deja dormir? He visto que todo el tiempo lo menciona en sus micrófonos como si de un cáncer político se tratara. Habla una persona que no se ha dado cuenta de que ese tipo de términos en realidad no existen más allá de las mentiras que gente como usted ha expuesto en los últimos meses con tal de generar una crisis nacional a través de los medios tradicionales. Dígame: ¿A usted le molestan las actuaciones de Gustavo Petro? No hay que negar que ha cometido errores y está siendo mal asesorado, pero usted tampoco es que sea una blanca paloma cuando nos referimos a los medios tradicionales mentirosos y tergiversadores como el que usted lidera actualmente. ¿A usted le hizo algo el hoy presidente de Colombia en el pasado? Porque en vez de mostrar alguna reacción o comentar algo sobre los trinos que él pone, solo publica las columnas que usted escribe y así deja algo de rastro en su perfil de Twitter.
Hay mucho alboroto en su entorno político y necesitan tener bodegueros que desinformen y hagan de las suyas para poder tener la atención del pueblo y seguir distrayéndolos con sus noticias falsas, creando así cortinas de humo y evitar que sigan hablando de temas bastante controversiales que a personas conocidas les afecta con total evidencia. Suena algo dentro de su cabeza que pasó por su nariz y no lo deja pensar con claridad, por mucho que intente pasarlo desapercibido; su racionalidad cuando habla de las cosas que él hace lo pone en una situación incómoda. Con el tiempo se ha demostrado que solo recibe órdenes de esos mismos oligarcas a los que hemos criticado por años y que solo buscan acabar con esa revolución que el pueblo consiguió en 2021, y que gente como usted, señor Lozano, ha manifestado que lo ocurrido en el país fue una “toma guerrillera”.
Un acto simple que cambió el país para siempre, pero que usted haya guardado silencio cuando se estaba evidenciando que el mismo gobierno dictatorial de Iván Duque estaba atentando contra los colombianos usando tanto a la policía como al ESMAD en ese entonces. El reflejo de su aporofobia e indolencia ante los colombianos le empieza a cobrar factura ante las críticas que llegan a su emisora y a sus compañeros, cuya reputación no es muy buena que digamos. En fin, hay muchas dudas y debe mentirles a los oyentes que lo escuchan para poder ganar algo de atención y que parte de los medios tradicionales consigan la cizaña con la que siempre se han caracterizado últimamente. En serio, les afectó mucho ver ganar a Petro hace más de dos años y en pleno auge electoral.
Miren nada más. He aquí a un esbirro de un medio tradicional que está en su búsqueda desesperada de infundir pánico en las calles de Colombia por el simple hecho de que no le guste el gobierno actual, porque por más que en el pasado haya presentado leyes que hoy en día benefician a los trabajadores, su gestión en el “periodismo” es bastante deplorable y, ante su situación actual, no veo que logre conseguir lo que quiere. Entonces, ante todo lo que está haciendo desde sus redes sociales, ante la poca actividad que tiene, el señor Juan Francisco no tiene la menor idea de lo que quiere el pueblo colombiano y de los cambios que el país necesita. Entendemos que su nariz no le permite percibir los nuevos olores que hay en las calles actualmente porque acostumbró su sentido del olfato a la defensa del narcotráfico, la corrupción y la impunidad de esa élite a la que sirve.
Su estupidez es predecible y sus estrategias de atención periodística no son para nada impresionantes, ya que hasta le falta un poco de tacto literario. Le hago la siguiente pregunta: ¿Ha leído alguna vez en su vida las bagatelas de Antonio Nariño? Bueno, usted debe saber que César Gaviria, cuando fue presidente a inicios de la década de los 90, prohibió las clases de historia en el país y dicha prohibición se mantuvo durante los dos períodos presidenciales de su amigo Álvaro Uribe Vélez (hoy procesado y en juicio), y que gracias a dicha prohibición hay mucho colombiano ignorante que lo escucha todos los días creyendo sus mentiras y acude a la desinformación mediática. Juan Francisco el pasado 10 de febrero sacó una columna en el periódico El Tiempo exponiendo una vez su trauma por ese “petrismo” en el que insiste demostrar su existencia. Esto fue lo que dijo.
“2026: telepartidor petrista. Se equivocan si creen que el petrismo está derrotado. Por el contrario, tiene casi fijo un cupo para segunda vuelta en 2026, a pesar de todos los errores, los escándalos y todos los incumplimientos… y la oposición fragmentada. Pilas”.
Por eso quiere que el expresidiario y acusado sea candidato vicepresidencial en las elecciones de 2026. Ya destapó por completo su lado uribista.
Para ser columnista, se comió varios espacios en ese trino en específico, donde demuestra que no tiene otro tipo de términos para buscar generar algún tipo de atención y querer infundir el pánico en la mente del colombiano promedio. ¿Verdad, Juan Francisco? Una persona supremamente asustada que necesita un poco de atención y sigue creyendo que esa tendencia política del “petrismo” es real ante sus ojos, ya que pareciera que esa columna simplemente fue redactada por los pelos de su nariz y no usando sus propias manos. Puede que se ofenda con esto, pero puede oler el miedo a pocos centímetros de su entorno personal y saber que cuando alguien lo vigila, siente esa sensación de no estar solo. En fin, busca imponerles a los colombianos que los medios alternativos y la gente que no es de su mismo entorno son quienes lo tienen en el lugar que está actualmente porque ellos informan mucho mejor que usted.
Sé que usted ha escuchado hablar de mí y en cualquier momento mencionará esto frente a sus colegas y empezará a decir que soy algo peor que un extremista, como hizo Julio Sánchez Cristo hace 7 años cuando me di a conocer por primera vez usando el humor negro. No todos hoy en día soportan ese tipo de cosas porque sus mentes se volvieron frágiles o ese progresismo corrupto en el que siguen creyendo ellos no les permite aceptar las cosas como son, por el simple hecho de haber contado un chiste de un calibre muy grueso. Para la gente que no está enterada de lo que usted hace, señor Lozano Ramírez, vemos aquí a alguien que necesita ayuda de un diccionario y recordar cómo es que funciona esa herramienta literaria que actualmente muchos han olvidado. La hipocresía de una persona que sigue creyendo que en el Catatumbo las cosas no van por buen camino, según usted.
“Catatumbo ardiendo: la guerra total. En esa zona de gente buena, convertida en campo de guerra de terroristas enfrentados a sangre y fuego por el emporio cocalero y rentas ilegales; prueba que replegar la fuerza pública no ayudó a la paz. La hace imposible”.
Otro indolente y arrogante personaje que tergiversa lo que ha estado pasando en el Catatumbo y no se atreve a aceptar que con esa decisión se está haciendo lo que sus amigos de la secta de la endogamia uribista no fueron capaces de hacer en su momento. Como dije, esa nariz suya no le permite ver más allá de los hechos externos, porque es una persona poco agraciada donde presume de ser alguien profesional y cree saberlo todo. ¿Le gusta alborotar el avispero y aun así quiere vivir arrodillado y conforme ante los intereses de esa élite a la que tanto sirve, Juan Francisco? En lo poco que he visto de usted, solo se ve a una persona que ha perdido esa rama periodística que tiene y todo por una sola persona. ¿Por qué lo odia sin que él le haya hecho algo? ¿Acaso le quitó algo a modo personal? Razones hay bastantes y tomaré varios ejemplos para mostrarles a sus contradictores la clase de persona que es ante el presidente que el pueblo colombiano eligió. Como siempre, buscará victimizarse.
Veamos aquí algunos de esos casos donde Juan Francisco Lozano Ramírez ha generado todo tipo de controversias, por su odio al presidente de Colombia. ¿Qué podemos esperar de alguien que culpó a una persona de que los nacimientos en el país disminuyeran? Esto ocurrió el pasado 21 de diciembre cuando a este director de la red de emisoras de la FM se le ocurrió la brillante idea de decir que por culpa de Gustavo Petro los jóvenes habían perdido el deseo de tener hijos. Según las estadísticas publicadas por el DANE, entre enero y octubre del año 2024, los nacimientos han venido disminuyendo un 14,4% en comparación con el mismo periodo del año anterior, registrándose apenas 317.000 nacimientos en lo que va del año. Además de eso, ningún mes del año pasado pudo superar los 40.000 nacimientos.
Sin embargo, en el artículo publicado por Pluralidad Z, no solo se evidenciaron las pruebas de la disminución de la natalidad en Colombia, sino que Lozano Ramírez se elogió a sí mismo al comparar la situación de los nacimientos en el país con la gestión del gobierno actual. Y es que era de esperarse de alguien que usa su nariz para decir cualquier tipo de estupidez por buscar algo de admiración por parte de los colombianos, sabiendo a ciencia cierta que su forma de expresarse no ha cambiado en nada, porque siempre ha quedado en las burlas de quienes hemos dicho la verdad y cuestionamos su forma de pensar. Estando convencido de que su argumento es válido, le dijo a los jóvenes del país lo siguiente:
“Yo sí me pongo en el pellejo de un joven que haya oído noticias de los últimos 15 días y piensa en sus hijos. Los engañaron con el tema del ICETEX, entonces ahora no pueden ir a la universidad. Les están incumpliendo con el sistema de salud, y es incierto qué servicios les van a prestar”.
A fin de cuentas, Lozano quedó en ridículo.
Otra de las embarradas de Juan Lozano es que haya criticado la forma de gobernar del presidente de Colombia, luego de que publicara una columna en donde menciona que la oposición debe crear un frente para conseguir el rival que le pueda opacar los planes de continuismo del presidente para avanzar con lo que tiene programado para cambiar el país. Llamando la atención como siempre y no presentando algo coherente desde esos pasquines a los cuales se arrodilla por un poco de respeto. Lo he dicho varias veces aquí, y es que Juan Francisco no sale de ese mismo vocabulario frenético y psicópata, del cual ya conocemos respectivamente. ¿Qué dijo esa vez en el mes de mayo del año pasado?
“La reelección del petrismo. O se articula ya un frente patriótico amplio, esperanzador, vigoroso, futurista y popular para enfrentar y derrotar al petrismo -que ya tiene un cupo en la segunda vuelta del 2026- o después será muy tarde. Lección aprendida”.
Entre tantas cosas descabelladas y escrituras de forma nasal, al presidente Petro no le cayó bien esta columna y respondió al pseudoperiodista de la siguiente manera.
“¡Ay, Juan! Lo único que han dejado sus amigos es un país sumido en la desigualdad, la exclusión, la violencia y la desesperanza. ¡Que se reelija la esperanza y el cambio!”
Anda tan inseguro con todo lo que dice, que hasta tiene su propio discurso de desprestigio, y ya se dieron cuenta en La FM que esa estrategia barata no les va a seguir funcionando, porque tienen todas las de perder. Pero aquí hay una pregunta que no nos ha dejado del todo clara su situación actual, señor Lozano Ramírez. ¿Por qué usted posee un esquema de seguridad por parte de la Unidad Nacional de Protección, si se comporta de forma hipócrita criticando al gobierno y al mismo tiempo vive de la teta del Estado? Cree que algo malo le va a pasar y más si su nariz es un blanco vulnerable. Yo lo veo de esa manera, porque no falta que alguien le suene los mocos por irrespetar la voluntad del pueblo colombiano. Por eso es que se esconde como un ratón de sus detractores, porque sabe que podría terminar muy mal físicamente.
Más bien, debería de regresar esos vehículos que custodian su protección y desistir de sus millonarios recursos.
¿Qué piensa de todo esto, Juan Francisco? Los colombianos coinciden conmigo en que su periodismo es basura al 100%, y que no seguiremos siendo sumisos ante una persona que huele las cosas de forma negativa y tiende a burlarse de personas que no son iguales a usted. En fin, se ríe de gente como yo porque somos diferentes, pero me he reído siempre de usted porque son todos iguales de acéfalos e ignorantes. ¿Estaba buscando alguien que le hiciera contrapeso a sus columnas? No seré el experto, pero el conocimiento que he ganado en los últimos años sirvió para ver caer lo que usted ha defendido por años: el uribismo. ¿Qué se siente saber que un simple antihéroe político con un blog ha dejado atónitos y desesperados a un grupo de personas que no puede contra una persona que defiende el nacionalismo en Colombia? Usted solo es un badulaque que quiere seguirse definiendo como otro opositor más ante un trauma político que la secta uribista inventó hace años.
Lo que usted más teme es que exista en el país una Ley de Medios que ponga en su lugar a gente como usted que solo está acostumbrada a la desinformación y la injuria de quienes no siguen sus mismos pensamientos periodísticos, donde solo consiste en mentirles a los colombianos mientras les lava la cara a sus amigos que lo protegen. ¿Va a darle quejas a la FLIP después de victimizarse? Un señor con una avanzada edad no quiere que el país cambie porque su nariz ha olido toda la vida el olor de la sangre, la impunidad y las drogas que ellos necesitan para seguir manteniendo el poco poder que les queda. ¿No es verdad, señor Lozano? Al menos suene su nariz y conteste a las preguntas que se le han hecho aquí.
¿Cuánto tiempo durará diciendo sandeces por las palabras tajantes de una persona que leyó a Nariño y sus bagatelas? ¿Seguirá insistiendo en que ese “petrismo” es el culpable de su adoctrinamiento político y “periodístico”?
Lo que veremos después serán pataletas de una persona que se ahoga en sus propias fosas nasales con cualquier comentario que salga de su boca.
Ya verán los futuros efectos venideros.
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